Jesús Alonso, fundador de la conservera Rianxeira, siempre fue consciente de que una buena publicidad es sinónimo de unas buenas ventas. Desde el primer día que abre su factoría, entiende que la publicidad en este sector es uno de los pilares estratégicos del negocio.

Cuando la radio abrió nuevos caminos publicitarios, Rianxeira no dudó en aprovechar el poder de la radiodifusión para divulgar su mensaje por medio oral y poder llegar así a todas las clases sociales del país. Para ello acudió a los locutores con mayor aceptación y popularidad en las ondas. Joaquín Prat, Iñaki Gabilondo o Luis del Olmo son algunos de los nombres que estuvieron presentes en el lanzamiento definitivo de la marca gallega.

Un nombre que nos gustaría destacar entre todos ellos es el de Pepe Domingo Castaño, gallego de Padrón, y con una de las carreras radiofónicas más destacadas. El equipo de marketing de Rianxeira no lo dudó un segundo y subió todo su carisma y su atractiva personalidad en un helicóptero, micrófono en mano, para promulgar las virtudes de los productos de la conservera por media España. Decenas de miles de personas se agolparon en calles y plazas españolas aguardando la llegada de un helicóptero que, con uno de los grandes locutores a bordo, aterrizaba para repartir cuantiosos premios. Una vez más Rianxeira demostró su compromiso y su cercanía con los clientes, como lo seguiría y sigue haciendo a día de hoy.